Romance en todas partes: Descargar El nombre del viento (Sinopsis, Crítica, Book trailer..)

“Me llamo Kvothe, que se pronuncia ‘cuouz’. Los nombres son importantes porque dicen mucho sobre la persona. He tenido más nombres de los que nadie merece. Los Adem me llaman Maedre. Que, según como se pronuncie, puede significar la Llama, el Trueno o el Árbol Partido. Mi primer mentor me llamaba E’lir porque yo era listo y lo sabía. Mi primera amante me llamaba Dulator porque le gustaba cómo sonaba. Me han llamado Kvothe el Sin Sangre, Kvothe el Arcano y Kvothe el Asesino de Reyes. Todos esos nombres me los he ganado. Los he comprado y he pagado por ellos. Pero crecí siendo Kvothe.
Una vez mi padre me dijo que significaba ‘saber’. He robado princesas a reyes agónicos. Incendié la ciudad de Trebon. He pasado la noche con Felurian y he despertado vivo y cuerdo. Me expulsaron de la Universidad a una edad a la que a la mayoría todavía no los dejan entrar. He recorrido de noche caminos de los que otros no se atreven a hablar ni siquiera de día. He hablado con dioses, he amado a mujeres y he escrito canciones que hacen llorar a los bardos. Quizá hayas oído hablar de mí.”
Así empieza una historia extraordinaria. Músico, mendigo, ladrón, estudiante, mago, héroe y asesino: esta es la leyenda que se ha forjado alrededor de la figura de Kvothe. Ahora, por primera vez, él va a relatar la verdad sobre sí mismo. Y para hacerlo bien, deberá empezar por el principio: su infancia en una troupe de artistas itinerantes, los años malviviendo como un ladronzuelo en las calles de una gran ciudad, y su llegada a una universidad donde espera aprender una magia de la que se habla en las historias… Atípica, profunda y sincera, El nombre del viento es una novela de aventuras, de historias dentro de otras historias, de misterio, de amistad, de amor y de superación, escrita con la mano de un poeta y que ha deslumbrado -por su originalidad y la maestría con que está narrada- a todos los que la han leído.

“No sucede a menudo, pero El nombre del viento de Patrick Rothfuss sí es tan bueno como dicen las reseñas”, afirma la revista Locus. De más está decir que estoy de acuerdo.
Una obra compleja y singular, un magnífico debut. Patrick Rothfuss, quien acaba de salir a la luz, nos sumerge en un mundo de fantasía donde el personaje nos cuenta su historia, desde una posada.
Las primeras páginas dejan que desear, es cierto, pero no pasa mucho tiempo antes de que la historia comience a girar más deprisa. Te sumerge en sus páginas y te hace creer, por momentos, que ese mundo ficticio que el autor inventa, existe afuera, en ese mundo real que tan lejano nos parece. Muchas críticas lo comparan con otras obras, como Harry Potter o El señor de los anillos, pero yo no veo similitud. Patrick Rothfuss nos habla de magia como si de ciencia se tratara, explicando con detalles su funcionamiento, haciendo que durante el tiempo en que sostengamos el pesado libro en nuestras manos, creamos que ese mundo existe, no solo en nuestras mentes.
Uno de sus méritos, es el personaje principal. Tan bien dibujado, que se te hace imposible no sufrir con sus desgracias y festejar con sus victorias. Kvothe, así llamado, es quien lleva el hilo de la historia, es el hilo de la historia, quien hace que nos metamos en su piel y veamos el mundo con sus ojos. Quizá porque es la mejor descripción de un ser humano que he leído, quizá porque todos tenemos alguien como él dentro y necesitamos leer el libro para darnos cuenta pero, sea como sea, sin un Kvothe esta novela no habría tenido tanto éxito.
El nombre del viento es del tipo de obras que te sacuden, te hacen meditar y te plantean cosas de la realidad que nunca te habías puesto a pensar. Es del tipo de libros que pueden cambiarte, inculcarte nuevas pasiones y mostrarte el mundo a través de otro cristal. Te ayuda a seguir adelante, a ver tus metas con claridad y a alcanzarlas.
Una novela que tiene tanto literatura como canciones, tanto letras como música. Una crónica de amor, aventura, misterio y magia, contada magistralmente por un autor del que hasta hace poco nadie sabía. Rothfuss nos suspende de la realidad y no mete en su mundo, que después de leer el libro pasa a ser nuestro también.
¿Qué más puedo decir? Un libro digno de ser llamado mi favorito.